Cuando a una compañera se le diagnostica un cáncer de mama, las palabras que elegimos pueden levantar el ánimo o herir involuntariamente. Desde preguntas bienintencionadas pero hirientes hasta consejos no solicitados, estas conversaciones requieren sensibilidad y comprensión. Descubra lo que no debe decir y cómo apoyar verdaderamente a su colega durante este difícil momento. Aprenda la importancia de respetar los límites, evitar temas desencadenantes y ofrecer ayuda genuina. Al fomentar un lugar de trabajo compasivo, podemos crear un santuario para quienes se enfrentan a la adversidad, recordándoles que, ante todo, son personas, no sólo pacientes de cáncer.